el tren corre silencioso, voy de kunming a guilin, 18 horas de viaje. todo es primoroso aquí, aún en la clase más barata llamada literalmente "asientos duros".
hay aire acondicionado, doble cortina de tela en la ventanas, los asientos llevan fundas de jackard y una sobrefunda a la altura de la cabeza bordada. hay música funcional también, clásica ahora: están pasando danubio azul.
hay un empleado del tren por vagón y un dispenser de agua caliente para el té. pasa un señor con una pava gigante ofreciendo agua caliente, todos alargan sus termitos. pasan también dos carritos ofreciendo comida y bebidas, es lo más cercano a los vendedores ambulantes que veré. el verde se cuela por la ventana sin pedir permiso, colinas y colinitas, el aire tiene una diafanía inesperada. todos todos todos los campos están sembrados. no queda un milímetro cuadrado sin plantar. cruzamos varios puentes, intermitentemente detrás de las colinas asoma un largo enorme. es una represa hidroeléctrica, ahí se ven las chimeneas humeando al final del lago.
ya es de noche, los asientos son lindos pero incómodos, todavía quedan 14 horas de viaje. los chinos son ruidosos, mucho. gritan, escupen por todos lados y comen de un modo horrible, ruidoso, con la boca abierta, sorbiendo la comida, lo que sea, fideos, arroz, sopa. soy la única turista en el tren pero no existen aquí las miradas punzantes de los trenes indios.
en 14 horas me voy a encontrar con jonathan después de 7 meses. pienso cómo será viajar con él en estos trenes, en estos escenarios, después de los de la india. estoy agotada y aún así no me duermo.
n de la r, o sea, p: estoy pudiendo postear en blogger pero no cambiar la plantilla, así que el clima y el mapa seguirán indicando laos.
picasa no anda para subir las fotos, pero flickr sí, aunque es más complicado. si quieren ver las pocas que subí, click acá..
domingo, julio 18, 2010
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 aportes al desconcierto general.:
Bello, plipli, muy bello todo.
Publicar un comentario