domingo, primera vuelta, 6 de la tarde.
salgo de votar. veo un taxista tocando bocina alegremente. refunfuño: ganó macri. los tacheros son -en general- de lo más facho que hay.
domingo, segunda vuelta, 7 de la tarde.
estoy en casa de coca. dice: "prendamos la tele para ver como terminó".
y vemos a macri bailando.
coca dice: "mejor, veamos animal planet".
y vemos pingüinos bailando.
y siento que todo es la misma cosa.
martes, junio 26, 2007
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5 aportes al desconcierto general.:
sep
babylon apesta
y el cana me cerró la reja de la escuela en la jeta dos minutos antes de las 18hs.
afangullo!
Creo que juntando hinchas fundamentalistas de Boca y taxistas logramos un buen porcentaje de votantes a Macri.
¿Cómo que los pingüinitos son la misma cosa que ellos? Para Mí nada que ver: los pingüinitos son lindos y buenos, y Macri es feo y malo.
(?)
por acá escucho muchísimo el: yo no lo voté
y no sé, mucho no me importa. era cantado que maurizzio iba a ganar
"si el voto cambiase algo, sería ilegal" dijo Galeano y con mucha razón.
los cambios van por otro lado
un abrazazo, p!
es verdad lo que dice Jane. excepto dos compañeros del laburo, no conozco a nadie que lo haya votado (o que lo admita). sin embargo, ganó con el 60% de los votos. eso quiere decir que de cada diez personas, seis lo votaron. seis que podrían ser nuestros jefes, cajeros del supermercado, amigos, amantes...
me pregunto que pasaría si tuviera una gestión super-exitosa. estoy segura que todo el mundo diría que lo votó.
enigüey... jane dice con razón que el cambio pasa por otro lado. por lo pronto, pareciera que no ha pasado por nuestras cabezas.
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