como a las 10 de la mañana llegué cansadísima a Manali, al norte de la India, desde Chandigarh. Bueh, en realidad salí de Delhi a las 3 y algo, fui a Chandigarh, justo antes de las 10 pm me encontré con el CS que me alojó antes ahí para que me diera la toalla que me dejé olvidada hace 5 meses, nos tomamos un café en la Indian Coffe House y me tomé otro bondi a Manali. Dramático cambio climático y topográfico, acá, a más de 2000 metros de altura, hace frío y los picos que custodian el valle están cubiertos de nieve.
Tras deambular un rato encontré hotel tipo mediodía y me quedé dormida.
Soné que estaba en un lugar muy parecido al hotel donde estuve el último mes en Jaisalmer, en la terraza y bajaba a buscar algo al cuarto. Cuando me acercaba, algo se movió dentro de la habitación y se cerró la puerta; del lado de afuera había una nena de unos 4 años. Le pregunté quién estaba en el cuarto, a lo que me respondió inocentemente "Una columna". Después no me acuerdo bien que pasó, pero sí recuerdo que en vez de regresar a la terraza por la escalera, extendí las manos hacia adelante y volé. No recuerdo haber soñado nunca antes con volar. El tema es que el sueño era muy real, y me dió miedo! Entonces pensé que no era bueno, que me podía caer e instaneámente aterricé como si bajara con un paracaídas, pero muy suavemente.
A la tarde fui a chequear mi correo y Ka, la reina que me lleva el tema de los pasajes, me había respondido un mail, ratificando que mi pasaje Delhi Londres estaba cancelado y que mi vuelo de regreso a Argentina no se puede cambiar más allá de junio. Parece que no es momento de volar...
lunes, marzo 15, 2010
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