viernes, julio 02, 2010

diarios de motocicleta


el día siguiente en la moto estuvo pasado por agua. al principio parábamos cuando se largaba muy fuerte, pero al final ya no había más tiempo y teníamos que volver. uno de los primeros stops lo hicimos en tatbeng, en un mercado.
me pedí un café lao, que es café de filtro negrísimo con leche condensada. tercipelo en la boca.
el café de la meseta de bolaven es de los mejores de mundo, dicen, yo no tengo idea pero este está riquísimo. seguimos adelante, volvemos a parar en una especie de negocio que es también en una casa, nos sentamos a escurrirnos un rato con la esperanza de que pare. afloja la lluvia, seguimos adelante, otra vez empieza a pegar fuerte y el tema es que manejando no se ve nada, paramos otra vez a almorzar. las chicas tienen una fijación con la sopa de fideos "noodle soup", comen eso como desayuno, almuerzo y cena, yo las acompaño esta vez, me acuerdo del kung fu panda y su papá, que tenía el secreto para hacer la mejor noodle soup.
otra vez nos ponemos en marcha, le damos duro hasta que llegamos a paksong, perdemos un rato largo buscando una asociación de productores de café que no encontramos, al final vamos a un lugar sobre la calle principal, nos fajan 5000 kips por café y no se parece en nada al que tomé a la mañana, una lástima. desistimos de ir a ver la catarata que hay por ahí, estamos empapadas, lo bueno de este café donde estamos es que hay una cocina donde nos podemos calentar y secarnos un poco.
a las 5 ya no hay esperanza de que pare de llover, así que nos ponemos en marcha, las chicas se compran unos ponchos para lluvia, yo tenía mi rompeviento aunque aún con él puesto se me había mojado hasta la ropa interior.
una vez que el camino comienza a descender también el frío comienza a ceder, arriba del plató son 1200 mts sobre el nivel del mar y se hacen sentir. con el calorcito llega la oscuridad también, la luz trasera de mi moto no funciona.
tengo pensado tomar un bus a las 20.30 a vientiane, y para eso tengo que ir a lo florence a buscar mi mochila. llego a la casa de memoria, aunque me costó un poco encontrarla de noche y bajo la lluvia, flor me estaba esperando, tomamos un té mientras me ponía ropa seca y armaba la mochila, salimos juntas con ambas motos a devolver la mía y a tomar el bus.
las compañeras de travesía me esperaban en el lugar del alquiler, nos dijimos adiós que te vaya bonito, flor y yo en la misma moto vamos a la terminal que es super cerca, son 8.25.
pregunto en la ventanilla, me dicen que el bus está lleno, que no hay más lugar, esto ya lo escuché, me acerco al bus, hay un tipo con una planilla, le pregunto si hay lugar para uno más, me dice que espere, habla con otro, le dice farang no sé qué, yo levanto la mano diciendo "sí, aquí farang", al final dicen sí, me subo en la cabina del chofer, flor me saluda por el parabrisas, al final me dicen que hay una cama libre en el bus (es un bus cama, o sea que no hay asientos sino camas en todo el bus), perfecto, cada día me convenzo más de que cuando las cosas tienen que suceder, suceden.

0 aportes al desconcierto general.: